El presidente de la República de El Salvador, Nayib Bukele, ha firmado la esperada reforma al Código Electoral, en un movimiento histórico que reducirá el número de diputados de la Asamblea Legislativa de 84 a 60. Esta medida busca eliminar el ingreso de legisladores a través del residuo electoral y restablecer la configuración original del congreso, tal como era antes de los acuerdos de paz.
La aprobación de esta reforma tuvo lugar anoche en la Asamblea Legislativa, donde se contó con la dispensa de trámites para agilizar el proceso. El ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, presentó las iniciativas del presidente Bukele referentes al reordenamiento administrativo-político y territorial, que incluyen la reducción de los municipios de 262 a 44, así como la reducción de diputados.
La modificación del sistema electoral implica eliminar el mecanismo de residuos en la fórmula utilizada durante las elecciones. Hasta ahora, este sistema de representación proporcional asignaba escaños adicionales a los partidos políticos en función de los votos obtenidos, llenando así los curules con candidatos que a menudo obtenían una cantidad significativamente menor de votos en comparación con otros legisladores.
Residuos electorales.
Con esta reforma, los diputados serán asignados únicamente según la cantidad de votos recibidos por cada partido político, eliminando cualquier posibilidad de ingreso al congreso a través de los residuos electorales.
El presidente Bukele expresó su satisfacción por la firma de la reforma a través de su cuenta oficial de Twitter, resaltando que este cambio busca fortalecer la representatividad y la legitimidad del sistema democrático en El Salvador.
Esta medida, sumada a otras reformas en el ámbito político y territorial, representa un hito en la búsqueda de un reordenamiento administrativo y político más eficiente y acorde a las necesidades del país. La reducción del número de diputados y la eliminación del residuo electoral suponen una importante transformación en el sistema político salvadoreño y un paso hacia una mayor transparencia y participación ciudadana.
Los próximos pasos incluirán la implementación de las reformas y su integración en el marco legal del país, así como la adecuación de los órganos electorales para garantizar la correcta aplicación de las nuevas disposiciones.
