En un importante avance en la lucha contra el crimen organizado, las autoridades de Estados Unidos han deportado a Juan Carlos Nolasco Chicas, alias Calaca, pandillero de la MS-13 y uno de los delincuentes más buscados en El Salvador.
Nolasco Chicas era buscado por el asesinato del policía Francisco de Jesús Lizama López, ocurrido en Jucuarán, Usulután, en 2016, y estaba implicado en al menos otros tres homicidios más.
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Según ha confirmado el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), Nolasco Chicas fue enviado a El Salvador por agentes de la oficina de Operaciones de Ejecución y Deportación de Miami (ERO). La INTERPOL ya había emitido una notificación roja en su contra en 2015, y era uno de los 100 delincuentes más buscados por la Policía Nacional Civil de El Salvador.
La deportación de Nolasco Chicas representa un importante golpe para la MS-13, una de las pandillas más peligrosas de América Latina y Estados Unidos. Las autoridades esperan que este éxito contribuya a reducir la violencia en la región y a detener a otros miembros de la organización
